Protestan nicaragüenses contra TLC con Estados Unidos
La dirigente de la Coordinadora Civil, Violeta Delgado, dijo a la prensa que de aprobarse ese convenio "nos convertiremos en rehén de las transnacionales y las políticas económicas extranjeras".
Explicó que la coalición, integrada por 24 organizaciones, se opone a cualquier tratado que "someta a la nación, que impida el desarrollo integral de sus nacionales".
Demandamos al Congreso unicameral, dijo, que no se ratifique ese TLC que impactará de forma negativa en la economía y la población, ubicada como la más pobre de Centroamérica y la segunda con menos recursos en América, después de Haití.
Alertó Delgado que el acuerdo de libre comercio entre la subregión y República Dominicana con Washington barrerá con la producción nacional de alimentos, arruinará a la pequeña y mediana empresa y elevará el desempleo y la pobreza.
Confirmó que cuando este jueves miles de personas concluyan de desfilar por esta capital, realizarán un festival artístico, que forma parte de la protesta, frente a la Asamblea Nacional.
Agregó la dirigente social que como parte de la marcha, también realizarán mítines frente a la embajada de Estados Unidos en esta capital, así como en rotondas, parques, universidades y centros comerciales.
Los manifestantes, subrayó, se oponen además a la privatización de los recursos naturales, como el agua, que "reclamamos sea declarada patrimonio nacional".
Ya los 38 congresistas del Frente Sandinista de Liberación Nacional afirmaron que "no ratificarán el TLC", mientras los del Partido Liberal Constitucionalista (PLC) esperan por la decisión del Congreso estadounidense, para tomar una decisión al respecto.
La víspera, el secretario general de la Asociación Nacional de Educadores de Nicaragua (ANDEN), José Antonio Zepeda, confirmó a Prensa Latina que las protestas contra el TLC se extenderán por el resto de Centroamérica.
En Nicaragua, añadió, cerca de 200 mil trabajadores afiliados a la Central Sandinista de Trabajadores (CST), el Frente Nacional de los Trabajadores (FNT) y la Central de Unificación Sindical (CUS), participarán en esas acciones.
El movimiento sindical, puntualizó, considera que el acuerdo lesiona los derechos de los trabajadores, como es limitar la libertad y la convención colectiva.
Los documentos negociados entre los gobiernos neoliberales y Estados Unidos, acotó, excluyen hablar de la protección de los obreros, del incremento progresivo de los salarios y de beneficios sociales gratuitos para sus familiares e hijos, como son la salud y la educación.
Nos quieren convertir en simples peones de las empresas norteamericanas, en una moderna explotación de mano de obra barata diseñada por Washington, alertó Zepeda.
