Chávez, el ALBA y China
30-9-08
Chávez, el ALBA y China
Luis Melián
Beijing (PL).- La reciente visita del presidente Hugo Chávez a China trascendió el ámbito bilateral, al concretarse acuerdos que beneficiarán a otros países, con perspectivas mayores ante una propuesta de desarrollar relaciones entre el gigante asiático y el grupo integracionista del ALBA.
Ese mensaje estuvo presente en todos los contactos del mandatario venezolano con sus anfitriones en la capital china, incluidas las conversaciones con el presidente Hu Jintao y ejecutivos de empresas y corporaciones vinculadas con proyectos socio-económicos en aquella nación suramericana.
En esta ocasión, China y Venezuela firmaron varios acuerdos que responden al desarrollo de sus crecientes relaciones, las cuales tienen como expresión concreta un incremento hasta los ocho mil millones de dólares en comercio y otros contratos este año, cuando eran apenas de 200 millones hace una década.
Cierto que el sector energético es uno de los más dinámicos en los vínculos bilaterales, reforzados ahora con convenios para el aumento del suministro de fuel oil, construcción de refinerías y tanqueros, a lo que se sumó la renovación de un fondo común cuyo monto se duplicó, hasta 12 mil millones de dólares, entre otras decisiones.
Pero hay otros que trascienden el marco de los intereses de los dos países. Uno de ellos se refiere a un cable submarino entre Caracas y La Habana, analizado por Chávez y contrapartes chinas durante esta visita a fin de precisar detalles de la ejecución de ese proyecto, el cual tendría, según el presidente venezolano, ramificaciones hacia el resto del Caribe y Centroamérica.
Otro tema importante de este viaje fue el satélite de comunicaciones Simón Bolívar, cuyo lanzamiento se confirmó para el próximo 1 de noviembre.
Esa iniciativa deviene símbolo de las relaciones entre China y Venezuela, pero constituye otro ejemplo de cuanto estos negocios bilaterales aportan a países latinoamericanos.
Chávez recordó que en ese proyecto participará también Uruguay,con beneficios compartidos en las previsiones meteorológicas, entre otros.
De esa forma ilustró a empresarios chinos cómo los convenios suscritos con el gigante asiático llevan mejoras a otras naciones, todo lo cual sirve de aval para relaciones más amplias con aquella región.
Tomando esos ejemplos como base, el mandatario venezolano explicó a sus anfitriones que las empresas chinas podrían extender su actividad en beneficio de todos.
Recordó que en varias naciones latinoamericanas se desarrollan procesos políticos que prestan una mayor atención al desarrollo socio-económico, con énfasis en la lucha contra la pobreza, y que China puede sumarse a esos esfuerzos con la transferencia de tecnología, productos y servicios.
Esa idea fue retomada por Chávez en una conferencia de prensa que cerró su estancia en Beijing el pasado día 25.
En esa ocasión dijo que propuso al gobierno chino comenzar a elaborar mecanismos de cooperación con el grupo integracionista conocido como Alternativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), al cual pertenecen Venezuela, Cuba, Bolivia, Nicaragua, Honduras y Dominica, mientras países como Ecuador, Uruguay, Haití, Saint Kitts y Nevis, y San Vicente y las Granadinas participan en ese foro como observadores.
Recordó que Bolivia y Ecuador tienen abundantes recursos energéticos, todo lo cual favorece el desarrollo de relaciones con contenidos concretos en un mecanismo que ya cuenta con su propio banco.
Esa última entidad deviene una importante ventaja para potenciales nexos en un mundo donde escasean las finanzas para todo tipo de proyecto, sin olvidar que el ALBA se rige por principios como la solidaridad y la cooperación.
Estas ideas se inscriben en otro mensaje reiterado durante su quinta visita a Beijing.
Todo esto es parte de la nueva geopolítica mundial, afirmó Chávez, quien dijo que "se levanta un mundo pluripolar y se hunde la pretensión de un mundo unipolar".
Y con esa visión llegó el presidente venezolano a China, donde tan pronto descendió del avión resaltó como una de las grandes coincidencias entre ambos países el hecho de que construyen un mundo pluripolar.
Estamos adelantando una estrategia muy clara, coincidimos en esto, recalcó.
Si las relaciones entre el gigante asiático y el ALBA se hacen realidad, ello será nueva muestra del pluripolarismo necesario para lograr el equilibrio del mundo a fin de tener paz, como señaló Chávez al citar un pensamiento de Simón Bolívar, cuyas ideas el grupo integracionista simboliza.
