Ecuador: Negociaciones con Unión Europea
Ecuador: Negociaciones con Unión Europea
28-3-14
Se cumplió la segunda ronda de negociaciones entre nuestro país y la Unión Europea, UE, con el objeto de buscar avances en temas arancelarios, servicios, propiedad intelectual y contratación pública, entre otros asuntos pendientes que gravitan antes de lograr fórmulas de consenso que permitan acuerdos entre Ecuador y la organización multiestatal de Europa. Cabe anotar que nuestro Gobierno se ha negado a firmar un tratado de Libre Comercio con el bloque europeo, al estilo de los suscritos por Colombia, Perú o Chile, señalando que ese tipo de tratados no son convenientes para los intereses del país ya que representan limitaciones en materia agropecuaria y permitirían que los productos europeos compitan con desventaja para la producción nacional, a más de ser formas de neocolonialismo inaceptables.
Como sea, los sectores productivos del país presionan para que tengamos acuerdos ventajosos con la Unión Europea, sin ser TLC, pero que se necesitan para el desarrollo y la diversificación de las exportaciones ecuatorianas hacia el Viejo Continente, algo en lo que también se hallan de acuerdo las autoridades económicas del país, por lo cual el Ministerio de Comercio Exterior encabeza las denominadas rondas de negociación con la Unión Europea, tendientes a lograr esos objetivos.
Por cierto, no todos en el país se hallan de acuerdo con estas negociaciones, ya que por ejemplo la Confederación de Nacionalidades Indígenas, CONAIE, a través de su líder Humberto Cholango se permite nada menos que calificar de “traición” a esas conversaciones que, según dicha organización, tendrían por objeto la firma de un Tratado de Libre Comercio con la Unión Europea.
Sin embargo de estas opiniones, más bien de tipo político, es necesario arribar a acuerdos sólidos con el bloque de Europa Occidental, el segundo más poderoso de Occidente, si no queremos quedarnos atrás de nuestros vecinos, que ciertamente mantienen ventajas respecto de nosotros en los ámbitos comerciales y arancelarios. El Gobierno por su parte ha señalado que cualquier acuerdo a conseguirse no lesionará la soberanía nacional ni los intereses de los sectores campesinos o de la producción local. En definitiva, lo importante es avanzar en esos diálogos con la UE.
