Centroamérica: cómo destrabar la telaraña
El panel sobre los \"TLC regionales y bilaterales: situación actual de los acuerdos y estrategias de los movimientos sociales\" , acaparó la atención de numerosos representantes populares, campesinos, indígenas, sindicales, de jóvenes, mujeres, juristas y parlamentarios que participan en el IV Encuentro Hemisférico de Lucha contra el ALCA, que se desarrolla en La Habana.
Con Carlos Aguilar, miembro de la Alianza Social Continental, COMPA, Encuentro Popular y Grito de los Excluidos de Costa Rica dialogamos sobre el proceso de negociaciones oficiales del ALCA y las implicaciones de los acuerdos regionales y bilaterales de libre comercio para la región Centroamericana.
El ALCA si bien se ha detenido, tiene una gran capacidad para mutar, de hecho los acuerdos bilaterales y regionales así lo demuestran. ¿Crees que realmente estemos ante su fase conclusiva?
\"El ALCA forma parte de la estrategia del gobierno de los EE.UU. y de otros organismos financieros internacionales como el Banco Interamericano de Desarrollo, el Banco Mundial; ellos otorgan préstamos y una gran cantidad de millones de dólares para permitir esos procesos de negociación de los TLC, de modo que esa estrategia se convierte una gran telaraña en la cual los acuerdos bilaterales que promueve EE.UU. implican no sólo a esta parte del mundo sino a países del Medio Oriente, África y Asia, y cuya finalidad es favorecer al capital transnacional y a las grandes corporaciones.
Claro, Centroamérica no es ajena a esto. Es necesario conocer bien ese entramado para comprender en qué grado el ALCA deja de ser una amenaza o lo sigue siendo. Muchos de los contenidos que se negociaban en el ALCA, ahora están incorporados en los contenidos de los acuerdos bilaterales, tanto con los EE.UU. como con la UE, -otra de las grandes amenazas que ha empezado a padecer Centroamérica- y que se agravará dentro de muy poco.
De modo que la región se enfrenta a una estrategia múltiple que implica no sólo el tema del libre comercio, sino también la militarización y la represión. El ALCA, por tanto, es un proyecto de dominación que no se resume en la letra de su texto -el que en efecto está empantanado- sino que, si se le coloca en una dimensión más amplia, hay que reconocer que sus amenazas son totalmente vigentes para el continente.\"
Centroamérica tiene inmensos recursos naturales que la convierten en un plato muy apetecible para las empresas transnacionales...
\"Esta es una zona que interesa, particularmente, a los EE.UU. por su posición geopolítica, y su salida al mar Caribe. Los gobiernos norteamericanos han gozado de una influencia histórica determinante en esta área que ha influido en la correlación de fuerzas en el continente.
Sin lugar a dudas conquistar la zona mediante un acuerdo de libre comercio sería anexarse una región que le permitiría tener un rango de negociación más adelantado en relación con los países y gobiernos que, de alguna manera, están intentando sostenerse frente a los desequilibrios de los acuerdos de libre comercio, en particular, algunas de las naciones que integran el bloque Mercosur y Venezuela.
Luego está el tema de la mano de obra barata. Esta región se ha convertido en la gran fábrica maquiladora de las empresas textiles norteamericanas y, en algunos casos, europeas. Por otra parte, es muy rica en recursos de la biodiversidad con fuentes de agua potenciales para el consumo, con inmensos bosques, flora, fauna y eso es un plato muy codiciado para las empresas que trabajan con derechos de propiedad intelectual y patentes.\"
¿Cómo podrá enfrentar la región ese inmenso desafío, en especial, los movimientos sociales y populares luego de la desarticulación que sufrieron en la década de los ochenta como consecuencia de la guerra de baja intensidad y las agresiones que dejaron una gran cantidad de muertos, desaparecidos y una fragmentación de la resistencia?
\"Los movimientos sociales en Centroamérica están tratando de levantarse luego de lo que significó la agresión militar y diplomática, la guerra que fue brutal y dejó miles de muertos, de asesinados, de hombres y mujeres que lideraron y caminaron con los movimientos sociales y fueron exterminados físicamente por un proceso muy complicado de institucionalización de muchas de las fuerzas políticas de izquierda.
En ese sentido, se hacen esfuerzos por reconstituir los movimientos sociales en toda la región. Creo que uno de los espacios más interesantes es el Foro Mesoamerciano. El año pasado fue su quinta edición en San Salvador y en diciembre de este año le corresponde a Costa Rica organizarlo.
Este espacio intenta articular los movimientos de resistencia frente a los acuerdos de libre comercio, al Plan Puebla-Panamá, a la OMC, al Banco Interamericano de Desarrollo, al Banco Centroamericano de Integración Económica y a una serie de problemas que podrían identificarse con el sistema capitalista de globalización neoliberal; además busca relanzar el tema de las alternativas y la integración de los pueblos, una apuesta diferente por la vida y el futuro de nuestras naciones.\"
