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Divergencias de candidatos republicanos y demócratas sobre política comercial de EEUU

8-9-08

Divergencias de candidatos republicanos y demócratas sobre política comercial de EEUU

Debates acalorados sobre la política comercial

La política comercial es uno de los temas en que los candidatos demócratas y republicanos concentran sus debates. Además de las divergencias entre el candidato republicano John McCain partidario del libre comercio y el demócrata Barack Obama que subraya los derechos de los trabajadores, también hay diferencias en las ideas de los mismos demócratas, tales como Hillary se inclina al libre comercio. Para explicar claramente este fenómeno se debe revelar el factor político detras de la política comercial.

La política comercial reviste de un clor partidista

Para los economistas de diversos puntos de vista políticos, el comercio es el motor de importancia primordial del desarrollo económico, capaz de promover el enriquecimiento social y la libertad política. De acuerdo con un instituto de estudios económicos de EEUU, en la última década, el libre comercio ha ayudado al país aumentar en un 40 % el PIB y en un 13 % el empleo. La actual política comercial del gobierno de Bush consiste en la promoción de la liberalización comercial multilateral, bilateral y regional.

Sin embargo, al igual que la política, la política comercial de EEUU también tiene carácter partidista. Con la aprobación de la ley de comercio recíproco en 1934, los demócratas y los republicanos comenzaron a compartir gradualmente la misma postura en el libre comercio, y el compartimiento se fortaleció tras la aprobación del GATT en 1994. Ambas partes dejaron al lado su posición idéntica al respecto tras la aprobación del NAFTA y la ronda de Uruguay de la OMC.

De allí la política comercial volvió a tener carácter partidista. El congreso comezó a recuperar el control sobre la política comnercial concedido por la constitución. En las deliberaciones sobre el NAFTA, hubo muy enconados debates sobre el estandarte laboral y el problema medioambiental. El gobierno de Clinton se vio obligado a presentar un acuerdo adicional sobre el tema para la aprobación del NAFTA en el congreso.

Las actitudes de los demócratas y los republicanos hacia el libre comercio

Durante el periodo comprendido entre los finales del siglo XIX y los principios de siglo XX, los republicanos se abogaban por el proteccionismo y los demócratas, por el libre comercio, ya que los republicanos del Norte del país deseaban proteger las industrias nacientes en esta zona. Por su parte, los demócratas en las regiones agrícolas meridionales preferían el libre comercio. Sin embargo, debido a la presión de las organizaciones sindicales tradicionales, los demócratas, que sospechaban de su posición de apoyo al libre comercio, comenzó a apoyar la política de protección comercial basada sobre los derechos laborales y el medioambiente.

La representante comercial de EEUU, Susan Schwab, y el congreso llegaron en 2007 a un compromiso en el más contencioso problema de los derechos laborales. Sin embargo, el congreso retrasó la aprobación de los tratados de libre comercio con Colombia y Carea del Sur. Según analistas locales, esto se debe a que el congreso no quería ver que el presidente Bush lograra una nueva victoria. Además intentaba evitar las críticas en lo político acerca de la política comercial para llegar a un compromiso después de la toma del poder por parte del nuevo presidente.

Las divergencias entre los demócratas y los republicanos

En los últimos años, un grupo de congresistas y un creciente número de estadounidenses creen que los tratados de libre comercio firmados por EEUU con otros países han hecho perder muchos empleos en el país. El NAFTA es el más contencioso que afecta a 439 millones de personas y productos y servicios por valor de 1.530 millones de dólares. Los partidarios del libre comercio sostienen que el levantamiento de las barreras comerciales y la apertura del mercado han promovido el desarrollo económico de los EEUU, Canadá y México. Tras la aprobación del NAFTA, la exportación de EEUU a México aumentó en 228 % y la exportación mexicana a EEUU, en 428 %. Del 1994 al 2007, el volumen comercial de los países signatarios del NAFTA se incrementó en 200 %. Sin embargo, no se han cesado los debates sobre los beneficios y las pérdidas que el tratado ha traído.

Los dos candidatos demócratas se han comprometido a volver a negociar el NAFTA, que ha sido el objeto de críticas en las preselecciones. Los críticos demócratas afirmaron que a partir del 2000 se han perdido 235.000 empleos en el estado Ohio tras la firmación del tratado. Sin embargo, los apoyantes del tratado han explicado que esta situación se debe a la automatización, la elevación de la productividad y el resurgimiento de China. Se quejan de la reducción del número de empleos a pesar del desarrollo de la industria manufacturera.

Debido a que algunos países de la región suramericana de libre comercio no ceden en la agricultura y otros problemas concerniente, lo que ha impedido llegar a un acuerdo. Esto ha sido considerado como un ataque significativo para la política comercial del gobierno de Bush.

Los analistas locales han afirmado que el U.S. - CAFTA - DR, acuerdo aprobado por el congreso de EEUU tras enconados debates, es el producto de la política parditista del país. Los oponentes creen que en el acuerdo carecen los criterios sobre el límite mínimo de los estandartes laborales a aplicar, lo que conduciría al traslado de los empleos a los países sin garantía de los derechos laborales.

Ya en 2004, los EEUU comenzó las negociaciones con Colombia, Ecuador y Perú sobre el tratado de libre comercio. Las conversaciones con Ecuador no han tenido éxitos y EEUU firmó en 2006 el tratado de libre comercio con Colombia y Perú, y otro documento con Panamá en 2007.

Tras lograr la mayoría en el congreso, los demócratas instaron a hacer modificaciones de los tratados de libre comercio de contenido similares básicamente al CAFTA. El 10 de mayo de 2007, el presidente Bush llegó a un compromiso con los congresistas demócratas para añadir los derechos laborales en los ya firmados acuerdos y otras concesiones en los terrenos de medioambiente, derechos intelectuales y la adquisición gubernamental.

Por su parte, los líderes demócratas declararon no considerar el acuerdo de libre comercio con Colombia antes de la disminución de la violencia contra los miembros sindicales, a pesar de que el el presidente colombiano había explicado que su país había hecho progresos en el aspecto. A principios de abril de 2008, el congreso de EEUU vetaron el acuerdo de libre comercio con Colombia, lo que constituye una señal de que el congreso controlado por los demócratas volverá a someter la actual política comercial del país al examen.

Politización de arancel preferencial

El problema de arancel preferencial también ha sido el objeto de enconados debates al igual que los tratados de libre comercio.

Al aplicar el generalizado sistema de preferencias (GSP), la Caribbean Basin Initiative (CBI) y el Andean Trade Preference Act (ATPA), los EEUU declaró abogarse por crear empleos en los países pobres con el desarrollo industrial y garantizar a la industria manufacturera estadounidense el suministro de baratas materias primas y productos intermedios, lo que permitirá la industria manufacturera estadounidense disponer de suficiente competitividad. Los demócratas apoyan estos métodos ya que los habitantes necesitados de estos países serán beneficiados. Los consideraban como ayuda en vez de comercio. Sin embargo, al ver los cambios en algún país que no les gustaban, algunos de ellos intentaban hacer una venganza mediante la modificación de las políticas preferenciales.

El trato preferencial que ha recibido Brasil ha sido un típico ejemplo al respecto. El país sudamericano fue víctima de la vanganza de anular su estatus guo como beneficiario del GSP, ya que se opuso abiertamente a la posición de EEUU en los problemas de la zona americana de libre comercio (FTAA) y en la ronda de Doha. Brasil se opone a abrir el mercado de servicios a EEUU, no está de acuerdo con la postura de EEUU en la protección de los derechos intelectuales y ha criticado abiertamente a EEUU por las subvenciones agrícolas y otras políticas proteccionistas. El congreso estadounidense anuló en julio de 2007 el trato preferencial a Brasil en algunos terrenos de acuerdo con GSP, lo que afectó a un número de mercancías por valor de varios centenares de millones de dólares destinadas a la exportación a EEUU y causó por primera vez desde 2001 el descenso de la exportación brasileña a EEUU bajo GSP.

Los acuerdos arriba mencionados están vencidos en el presente año y volverán a ser sometidos al examen del congrego de EEUU. La prórroga del trato preferencial que Brasil goza de acuerdo con GSP será contenciosa, ya que el congreso estadounidense relaciona el factor político con el comercio, como siempre ha actuado. (Pueblo en Línea)


 source: Pueblo en Línea